miércoles, 13 de mayo de 2015

Ducha de Cuco


Ya  hacía tiempo que no os ponía a mi amigo.
Hace una temporadita vino Víctor con un par de amigos a mirar el prado que será olivar.
A la vuelta, desde el camino , llamé a Cuco y cuando nos miró, le dije "Cuco, saluda" Y él, naturalmente, saludó. María no acabó de creérselo , pensando que era fruto de la casualidad.
No es casualidad que, con este calor, a Cuco le guste la ducha. Tampoco lo es que venga si lo llamo y se la ofrezco.
Disfrutadlo: aquí no hay trampa. Si Cuco votase, yo sería presidenta sin propaganda ni promesas. Nosotros nos conocemos "por nuestras obras".