En castellano, para diferenciar la necesidad de dormir de la búsqueda de la realización de locuras personales, tenemos que añadir cosas: tengo "un" sueño ¿cómo se puede añadir un indeterminado a algo que está tan definido en nuestra cabeza, tan determinado, tan exacto?; "mis" sueños; es imposible "mis" sueños, los sueños hay que enfocarlos de uno en uno, con determinación y especificando; luchando por ellos, entregándonos; varios juntos nunca se pueden realizar... pero, así funciona el castellano, porque si decimos "tengo sueño", si decimos "el sueño", si decimos "sueño", todo el mundo piensa en dormir.
Por eso amo el gallego en el que puedo decir "o soño quítame o sono" ( que, traducido al castellano sería "un sueño me quita el sueño").
Cada año que empieza debe ser el de la realización de un "soño". De un soño tan hermoso que os quite el "sono". (¿veis? tan pronto como se traduce lo determinado es la necesidad de dormir y lo indeterminado el ansia, la inquietud, la maravilla. ¡qué terrible!).
Yo, amigos, en un día demasiado gris, incluso para mi tierra, os deseo que en el 2011 "o soño os quite o sono"