jueves, 5 de febrero de 2015
la grandeza de Kiko 008
Pensamos que los seres humanos damos ejemplo a los animales y la naturaleza nos demuestra que es al revés:
Ayer vinieron unas amigas a comer conmigo. Entre otras cosas, preparé una lubina al horno y la puse sobre patata cocida en lonchas. La lubina se comió sin remedio, pero algunas patatas quedaron. Y como las gallinas son omnivoras allá se fue la bandeja del horno con los restos. Las gallinas llegan rápido y comen con gula. El gallo pica la comida y la suelta para que la coman ellas y no una sola vez, ni dos, ni tres, para que no haya dudas.
Bueno, sí, ya sé, también vuestros maridos os pelan el marisco y os lo ponen en vuestro plato hasta que os saciais...y luego, comen ellos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)