sábado, 24 de abril de 2010

Abierto desde el amanecer
















Me levanté y fuí a segar, porque hoy viene Alicia y tengo que ayudarla un poco también con su hierba.





Segué, junté, cargué y, ahí los teneis, felices.





El comedero de dentro tiene hierba seca, pero, ay, ¿quién quiere cosas viejas, teniendo la posibilidad de saborear ternura y juventud?...




Me miran como diciendo "ritmo, vieja".



(No sé que queja tienen, que aun no son las 12,30 y ya cumplí la primera parte)