las vacaciones. Uxía vino de Bristol y tuvo pizza especial con su nombre;
y "pulpo á feira" que por allá no hay;
Picantones con guisantes y patatas
y mi hermanita y yo alegrando la pestaña,
que los "pequeños" beben agua.
Y tarta de queso.
La semana, más que santa, fue mojada. Absolutamente pasada por agua.
Y aunque tanta lluvia acaba aburriendo a las mismísimas ovejas, yo me consuelo pensando lo feliz que va a ser Cuco con la cantidad de hierba que tendremos este año...
(A mal tiempo, buena cara)