miércoles, 9 de julio de 2008

Kevin Carter

Allá donde estés, perdóname.
Hoy he leído que, abrumado por el peso de l culpa de no haber ayudado a la niña de la foto, acabaste quitándote la vida. Perdóname, por favor, seguramente yo, que ayer presumía de ser más humana que tu, nunca hubiera sido tan valiente, ni llegado a tanto.